Más de Economía para todos
Roberto Arnaz - miércoles 22 de junio de 2011, 11:48
Si te llamas Xavier, ¡enhorabuena!. Los afortunados en cuya partida de nacimiento consta ese nombre son los que tienen más posibilidades de convertirse en altos directivos en España. Al menos así lo afirma un estudio elaborado por la red social de contactos profesionales LinkedIn, que afirma que los Albert, Enrique, Joan, Alex, Josep, Julio, Marc, Víctor y Santiago también tienen grandes opciones de llegar lejos en el mundo empresarial.
Según los investigadores de LinkedIn, el nombre de pila puede ser uno de los factores más determinantes en el éxito empresarial. La popular red social para la gestión de contactos, que contiene perfiles de más de 100 millones de practicantes en todo el mundo, ha identificado la correlación que existe entre los nombres más importantes del mundo de los negocios, su profesión y el nivel de carrera alcanzado.
Nombre corto, instinto comercial
En cuanto a las combinaciones de nombres y profesiones, los responsables del estudio han descubierto que, curiosamente, en numerosas ocasiones la longitud del nombre está directamente relacionada con el sector profesional. Por ejemplo, los nombres de cuatro letras y las abreviaturas (como Alex o Joan) son muy comunes entre los responsables de ventas.
Según el experto en onomástica Frank Nuessel esto se debe a que los nombres cortos hacen que en el cerebro se cree la imagen de que nuestro interlocutor es una persona cercana, abierta y amistosa.
Por el contrario, en sectores como la ingeniería abundan los nombres de seis letras, como Andrés o Víctor. Los nombres más largos, como Santiago o Alejandro, quedan reservados para los mandamases del turismo y la restauración.
Lejos de nuestras fronteras, los nombres más comunes de los altos directivos no están atados a estereotipos específicos. En los Estados Unidos, el nombre más común entre los presidentes de grandes empresas es Howard, mientras que en el Reino Unido es muy popular tener un jefe llamado Charles; en Francia, Gilles; y en Alemania, Wolfgang.
Mujeres en busca de respeto
La investigación también descubrió que entre los atletas de todo el mundo los nombres más repetidos son Ryan, Matt, Jessica, Matthew y Jason. En el mundo de la abogacía abundan los nombres masculinos como Billy, Darrell, Pete, Rodney y Troy, pero el campo de los recursos humanos es coto exclusivo de las mujeres: Emma, Katie, Claire, Jennifer y Natalie.
Por regla general, concluye el estudio, las mujeres no utilizan diminutivos a la hora de enfrentar el mundo empresarial. Con esta decisión, según los expertos de LinkedIn, buscan respeto y seriedad en el trato. Sólo una de las 1.000 mayores empresas estadounidenses está dirigida por una mujer que ha decidido deliberadamente acortar su nombre: Patricia Pat Woertz, presidenta de la empresa alimentaria Archer Daniels Midland.
